México creará 330 mil plazas universitarias en sexenio de Sheinbaum

Ciudad de México, 23 oct (Prensa Latina) El gobierno de México construirá sedes educativas públicas para garantizar el acceso a la universidad para 330 mil estudiantes durante el presente sexenio, informó hoy una autoridad.
Según el secretario de Educación Pública, Mario Delgado, con el propósito de cumplir ese objetivo la Universidad Rosario Castellanos tendrá otras 30 sedes con capacidad para 150 mil personas, y la de la Salud crecerá con 10 nuevas ubicaciones y 25 mil alumnos adicionales.
Asimismo, las Universidades para el Bienestar Benito Juárez García, un programa concebido durante la gestión del presidente Andrés Manuel López Obrador (2018-2024) para dar oportunidades a las personas excluidas del derecho a estudiar, tendrán 50 planteles más y otros 40 mil estudiantes.
El titular precisó que el Tecnológico Nacional de México garantizará el acceso a 85 mil alumnos más, y el Instituto Politécnico Nacional proporcionará 30 mil espacios.
«Estas son las metas que se están planteando. La Presidenta (Claudia Sheinbaum) había dicho por lo menos 300 mil lugares nuevos, ahí se están planteando 330 mil en la administración, para que cada vez más jóvenes que decidan estudiar tengan la oportunidad de hacerlo», manifestó.
Al intervenir también durante la conferencia de prensa de la mandataria, la secretaria designada de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación, Rosaura Ruiz, dijo que las nuevas sedes de las universidades de Rosario Castellanos y de la Salud, que pasarán a ser nacionales, se crearán en los denominados Polos de Desarrollo para el Bienestar.
Hemos tenido una gran demanda de los gobiernos locales, interesados en aumentar la matrícula para la atención a jóvenes que quieren hacer una licenciatura; empezaremos en el sureño estado de Chiapas y también en Tijuana, Baja California, en el norte, precisó.
Al hacer uso de la palabra, Sheinbaum recordó que durante años se cerraron los espacios para las universidades públicas, como parte de las consecuencias del modelo neoliberal, que «no consideraba a la educación como un derecho, sino como un privilegio».